Hace poco vi un video que subió una amiga a la red. Muestra a diferentes personas que llegan a una cafetería y hacen su pedido sin incluir un "buenos días" o "por favor". El locutor dice que los buenos modales muestran respeto hacia los demás.
Aunque me encantó el mensaje, considero que expresarse de una forma respetuosa y atenta habla más de quien habla que de quien recibe la muestra de respeto. Cuando vemos a alguien que no sabe decir un saludo, pide sin decir por favor, o algo similar, inmediatamente podemos sacar conclusiones sin tener que hacer investigaciones o tener mente de científico. Especialmente cuando se trata de gente joven pienso que es el reflejo de cómo se comportan las personas en su hogar y/o en su círculo más cercano. Viene a mi cabeza la expresión "así aprendió en su casa".
Tristemente algunas de estas personas de ordinarias maneras piensan que hacen menos a la otra persona, pero no tienen la capacidad de analizar que son ellos los que se ven mal y dejan ver su pobreza interior y carencia de educación: esa educación sencilla y básica que aprendemos con el ejemplo y que constituyen uno de los primeros regalos que podemos dar a los niños. Es por esto que digo que los buenos modales son una ventana... dejan ver lo que llevamos en nuestro interior y la abundancia o carencia que allí se encuentre.
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